Raíces, barro, piedras y broza taponan el desagüe al río de la «Fuente del Prau»
La rápida actuación del operario municipal de mantenimiento, evita la inundación de la explanada y caminos
Un vecino que hacía senderismo, aprovechando el sol de las horas centrales del día, observó que la fuente del Prau vertía fuera todo el chorro, al no evacuar el agua. Pensando que sería a causa del musgo y las hojas caídas que taponarían la rejilla, procedió a su limpieza… pero fue inútil, el agua continuaba derramándose sobre el camino, encharcándolo todo.
Así que la única opción era dar parte al alguacil y operario de mantenimiento, que bajó rápidamente y tras observar todo, determinó que el taponamiento era en el desagüe que vierte continuamente el agua sobrante al río. Así que, activó la bomba que sube el agua al depósito del pueblo, para vaciar así todo el vaso de la fuente y se metió en el río para buscar la salida del tubo de desagua el agua. No fue tarea fácil porque un conglomerado de raíces, ramas, piedras, barro y broza cubría todo el tramo donde calculaba que estaba el tubo. Tras trabajar durante casi una hora, pudo cortar y retirar todos los materiales que obstruían el tubo (incluso había raíces que se habían metido dentro). Al comprobar el vaso de la fuente y accionar de nuevo el chorro, se comprobó que la incidencia había sido solucionada.
La suerte ha sido que se detectó la obstrucción apenas transcurrida media hora de su inicio, porque si llega a ser a otra hora o no pasar nadie, la inundación de toda esa zona hubiera sido grande encharcando la explanada y los caminos que van a la huerta y al pozo del Cristos. Queda manifiesta la importancia de contar con personal de mantenimiento en el Ayuntamiento porque siempre hay averías o cosas que arreglar.
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