Sin ser tan fuerte como la nevada de 2010, un manto blanco cubrió de nuevo Alcaine y entorno

Cuando los medios de comunicación se hicieron eco de la información de AEMET de que una ola de frio polar atravesaría gran parte del país, provocando nevadas y bajada de temperaturas, la gente de Alcaine fue como de costumbre previsora, conocedora de que por la orografía de la zona puede ser fácil quedar incomunicados. La mañana del domingo 4 de febrero comenzaron a caer los primeros copos que pasadas las 10 de la mañana cubrieron parcialmente los tejados de las casas y las montañas que circundan la localidad, pero después apareció la lluvia y con 10 l/m2 la hizo derritirse. Al día siguiente se repitió la historia y no fue hasta el martes dia 6 cuando comenzó una nevada más copiosa a lo largo del día que consiguió cubrir todo de blanco. Los paisajes que podían observarse aumentaban más si cabe la belleza del pueblo y entorno pero la nieve y el frío también acarrean inconvenientes: impedir andar con tranquilidad por las calles, realizar el trabajo cotidiano, el acceso de las furgonetas del pan y venta ambulante al pueblo, etc.
Como la cota de nieve cayó a niveles muy bajos en toda la provincia de Teruel, en un centenar de carreteras fueron necesarias las cadenas y la circulación se cortó en algunas al sumarse las heladas en todas las comarcas. Las dificultades para desplazarse impidieron acceder al profesional sanitario al consultorio médico de Alcaine, al igual que en  Estercuel, Ariño y Plou. De igual manera las rutas escolares afectaron al 85% de los niños de la provincia que no pudieron acudir a las escuelas (los de Alcaine al centro educativo de Montalbán y la ruta a Utrillas desde Muniesa).
Pasado lo peor, el dispositivo de la DPT, Gobierno de Aragón y Ministerio de Fomento, solucionaron en un par de días los problemas y se normalizó la situación. En esta ocasión no fue necesario (como en la nevada del 2010 que acudiera la Unidad Militar de Emergencias (UME) a despejar la carretera TE-V-1146 que lleva a Alcaine.

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Desaparece una construcción elevada que rompía la armonía de la iglesia del siglo XVII asociada al barroco

El panorama urbano o línea de cielo (skyline, como es conocido en inglés) es la silueta del horizonte artificial creada por las estructuras que se levantan en una ciudad. Evidentemente se puede extrapolar a cualquier localidad, independientemente de su tamaño pero se verá influida por la extensión y variedad de las edificaciones. En el caso de Alcaine a la simple construcción urbana se suman, por su cercanía, algunos elementos que la complementan: las torres medievales, montañas circundantes y el anticlinal.
No cabe ninguna duda de que la edificación más emblemática de Alcaine es la iglesia parroquial de Santa María La Mayor y su torre de reminiscencia mudéjar la más admirada y fotografiada. Pero había un elemento que desde distintos ángulos rompía la armonía del conjunto urbano que la rodea. Durante el pasado mes en la casa adyacente a la iglesia (apenas separada por la placeta lateral) han realizado unas obras de rehabilitación que han forzado a eliminar (por su elevado peso) un palomar que se elevaba varios metros sobre el tejado y que obstaculizaba la visión de la torre de la iglesia en toda su plenitud. Esos palomares fueron construidos en el siglo pasado en algunas casas del pueblo y en zonas del entorno como un medio más de de provisión (huevos y palomas) para las familias.

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La carrera tendrá lugar en Alcaine (Teruel) el 6 de mayo a las 10:30 hrs. y con un recorrido de 12,1 Km.

Un año más (y van trece) Alcaine comienza a barruntar que la carrera está ya muy próxima al darse el pistoletazo de salida para efectuar las inscripciones. El número de dorsales disponibles está limitado a 300 tanto por la logística disponible en nuestro municipio como por el deseo de la organización de prestar la mejor atención y servicio posible a los participantes en la prueba.
La Carrera del Río Martín es una de las que alcanza más alto índice de satisfacción entre los participantes por el circuito, la belleza de los parajes naturales por los que discurre, la singularidad del casco urbano de Alcaine y el afecto y apoyo que transmite todo el pueblo y visitantes a los participantes en la prueba. También hay que destacar la excelente bolsa del corredor que se regala a los corredores inscritos que supera en mucho a otras de carreras de localidades más grandes e importantes.
Pulsando aquí se accede a la web de la carrera, con información del recorrido, consejos, reglamento, formulario de inscripción y diversos temas de interés. Anímate y participa el próximo domingo 6 de mayo en la XIII Carrera de Montaña del Río Martín. Vive un cúmulo de maravillosas sensaciones y disfruta de la carrera y del magnífico entorno de Alcaine.